Personalmente, me encanta estudiar pintura. Pero ahora sé que solo sirve para aprender cosas que se me olvidan si no las repaso a cada tanto. Seguro que tú también te has dado cuenta de que aprender muchas cosas no mejora tu pintura.
Verás, en la pintura no hay errores, sino soluciones que no nos gustan. Y no nos gustan porque, como humanos, tenemos aversión a la pérdida.
¿…Pero a qué pérdida? —te preguntarás. Y aquí viene la parte más difícil de digerir.
Nos aterra perder para siempre nuestro particular modo de hacer las cosas, nuestra personalidad.
Frank Sinatra estaba equivocado, hacer las cosas «a tu manera» solo te llevará a los mismos resultados. Para mejorar debes, precisamente, dejar de hacer las cosas «a tu manera».
¿Sabes por qué estudiar pintura no funciona?
Porque tu pintura no cambiará por saber más cosas. Tu pintura cambiará cuando tú cambies como persona. Solo mejorarás cuando te desapegues del resultado y confíes en un proceso diferente. Un proceso mejor que «el tuyo».
¿Cómo se te queda el cuerpo?
Y esto solo llega de la mano de la experiencia, no de estudiar pintura. La transformación viene de conocerte a ti mismo a través de la pintura, de relacionarte con otros artistas y de tener a un buen maestro a tu lado.
La fórmula del éxito en la pintura no es un secreto, solo debes seguir estos tres pasos:
- Observa cómo alguien bueno lo hace.
- Ensúciate las manos y hazlo por ti mismo.
- Rectifica los errores con la ayuda de un guía.
Esta es la ecuación que crea conocimiento 100% práctico y hábitos que te llevarán a dejar de pensar tanto en cómo estudiar pintura, para pasar directamente a pintar. Como lo oyes: no pienses en cómo pintarlo ¡Corta el rollo y píntalo!

«Me lo contaron y lo olvidé; lo vi y lo entendí; lo hice y lo aprendí.»
Cita atribuida a Confucio.
Tu pintura debe ser un acontecimiento visual, no intelectual. Y ese triple mortal no se consigue aprendiendo más y más trucos. Necesitas una transformación profunda.
Tu ego extiende cheques que tu pintura no puede pagar. Necesitas tapar la bocaza a tu ego con cinta americana, dejar de ser tan conservador con «tus cosas» y aceptar que deberás cambiar para mejorar. Hacer hueco a lo bueno para que quepa lo mejor.
Menorca Pulsar, el Retiro de Arte de mis sueños
Fundé Menorca Pulsar porque tenía una visión: crear un campo de concentración artístico donde fuera imposible no mejorar. Un retiro donde la camaradería, las tertulias y la apertura fueran el corazón de una experiencia transformadora.
Aquí se supone que hacemos talleres de pintura, pero solo son excusas para conseguir que la persona que toma el avión de vuelta no sea la misma que la que aterrizó.
Si lo que te he contado resuena en ti, estás destinado a venir algún día. Si todavía no lo has hecho, ojalá des el paso y nos podamos conocer en persona la próxima edición.
Regálate la oportunidad de unirte a esta tribu de locos por la pintura. Lo peor que te puede pasar es que recibas un tremendo empujón.